Verano y Sol

En el verano coincide con las vacaciones escolares, los niños no pasan ya largas horas en los salones de clase por lo que aprovechamos para salir en familia (incluidos los no escolares y lactantes) de paseo a la playa, al campo o simplemente al parque. El clima hace que todo sea más alegre y divertido, podemos bañarnos en la piscina, en el mar, jugar al aire libre, pero todo este nuevo contexto trae consigo algunas desventajas que debemos tomar en cuenta para prevenirlas.

Tomar precauciones frente a la exposición al sol es muy importante, sobretodo en los más pequeños y ancianos. El agotamiento por calor y el golpe de calor o insolación son riesgos al que todos estamos expuestos.

El agotamiento por calor es una consecuencia de la pérdida excesiva de agua y sales por medio del sudor, así como a una mala hidratación, pudiendo presentarse inclusive sin haber estado expuestos al sol. Sus síntomas son: abundante sudoración, dolor de cabeza, palidez, cansancio, calambres musculares, mareos, desmayos, etc. Si el agotamiento por calor no es tratado puede sobrevenir el golpe de calor o insolación.

La exposición prolongada a altas temperaturas y elevada humedad, característico de playas y piscinas incrementan las probabilidades del golpe de calor o insolación que sucede cuando nuestro organismo deja de controlar y regular la temperatura corporal al bloquearse el sudor, el cuerpo pierde la capacidad de enfriarse y se eleva notablemente la temperatura corporal. Esta elevación de temperatura corporal puede sobrepasar los 40º C afectando nuestros órganos internos e inclusive presentarse el riesgo de daño cerebral o muerte. Sus síntomas son ausencia de sudoración, agotamiento o cansancio, fiebre muy alta, pulso acelerado, piel colorada, caliente y seca, dolor de cabeza, mareos, náuseas, pérdida de conocimiento, etc.

Cuando se presenta un cuadro de agotamiento por calor, golpe de calor o insolación lo primero que se debe hacer es bajarle la temperatura al afectado:
> Llevarlo a un lugar fresco con sombra
> Darle de beber líquidos frescos
> Sacarle la ropa excesiva
> Darle un baño tibio
> Pedir ayuda médica de emergencia

RECOMENDACIONES
Se debe tener mucho cuidado cuando se llevan niños a la playa, sobretodo los lactantes que no pueden recibir ningún tipo de protector solar. Para los niños que puedan usar protectores solares usar los de factor de protección 20 como mínimo aplicándolos 30 minutos antes de la exposición al sol y repitiendo las aplicaciones constantemente.
No estar en el sol por tiempo prolongado entre las 10am y 4pm que son las horas cuando el sol es más dañino, si lo hace, intercale baños de sol y de sombra
Colocar sombreros a los niños y llevar siempre sombrillas o toldos.
Tomar abundantes líquidos